Cuando hablamos de estética dental nos solemos referir en la mayoría de las ocasiones al blanqueamiento dental y a la ortodoncia invisible. Vamos a bordar, sin embargo, un tratamiento que nos permite resolver muchos problemas estéticos de nuestra boca con un alto nivel de eficacia. Se trata, pues, de las carillas dentales.
Dicen los odontólogos de H.Q. Tenerife, una red de clínicas dentales ubicadas en la ciudad canaria, que las carillas dentales son un tratamiento destinado a recuperar la anatomía de las piezas dentales, corrigiendo una amplia variedad de imperfecciones, desde la forma y tamaño de los dientes hasta su dirección y apariencia.
Como veremos más adelante en profundidad, se tratan de pequeñas láminas de un material resistente, con el mismo tono que el resto de la dentadura, que se colocan sobre los dientes originales por medio de un adhesivo especial.
A grandes rasgos, podríamos decir que cualquier persona que quiera se podría colocar carillas dentales. Sin embargo, la revista Gaceta Dental insiste que antes de someterse al tratamiento es necesario realizar un estudio clínico de cada caso.
Esto significa que el candidato a colocarse carillas dentales será objeto de pruebas de diagnóstico como radiografías, escáner dental, tomografías, fotografías, etc. Esto se debe a que si existen determinadas enfermedades en la dentadura, es recomendable abordarlas antes de colocar las carillas.
Un ejemplo es el caso de personas que sufren periodontitis. Una enfermedad infecciosa que se produce en las encías, en las que el sarro y la placa bacteriana penetran dentro de los tejidos blandos de la boca, creando bolsas de placa entre la encía y el diente que terminan provocando la caída del diente natural.
De poco nos sirve restaurar un diente con una carilla dental si el paciente corre el riesgo de perder la pieza pasado un tiempo.
Las carillas dentales suelen ser de porcelana o de composite, una resina acrílica que endurece en la boca. Veamos estas dos modalidades y en qué se diferencian.
Carillas de porcelana.
Las carillas de porcelana se fabrican por encargo con porcelana, zirconio o disilicato de sílice. Lo que les atribuye unas propiedades de resistencia, dureza y aspecto estético notables. De hecho, la vida útil de estas carillas ronda los 15 años.
Se suele recurrir a estas carillas cuando se desea modificar el tamaño de un diente, restaurar fracturas, corregir la dirección en la que ha salido la pieza dental o camuflar manchas persistentes en el esmalte que son difíciles de eliminar.
Las carillas de porcelana se suelen encargar a un laboratorio protésico dental partiendo de un estudio previo de la dentadura y siguiendo las indicaciones del odontólogo. La fabricación del apósito se efectúa por ordenador, por medio de la tecnología CAD/CAM, lo cual permite simular pruebas digitales sin tocar la boca del paciente y diseñar piezas con una alta precisión.
Una vez las carillas han sido fabricadas y llegan a la clínica dental, el odontólogo debe limar el diente donde se van a colocar para eliminar la cantidad de esmalte que representa la carilla. De esta manera, una vez colocada, su apariencia es natural. No parece que nos hemos colocado ningún refuerzo en la boca. Estas carillas se adhieren al diente por medio de un adhesivo especial, no tóxico, de gran potencia. Lo que nos permitirá usar el diente en el proceso de masticado sin problemas.
A pesar de que estas carillas son bastante resistentes, no se recomienda morder con ellas determinados alimentos como pipas, cáscaras de frutos secos o marisco, ya que se pueden fracturar. En el caso de que se rompan, su restauración es compleja, por lo que se suele proceder a la colocación de otras nuevas.
Se trata de un tratamiento irreversible. Por lo que el paciente antes de someterse a él debe estar seguro de su decisión. Una vez instaladas uno no se puede echar para atrás.
Carillas de composite.
El composite es una resina bastante utilizada en odontología, que se adhiere por sí sola a la superficie del diente y que se puede moldear. Al colocarla, el odontólogo puede aplicarle un colorante para que la carilla adquiera un tono similar al resto de la dentadura.
Es útil para corregir determinadas imperfecciones del diente, pero no tanto para protegerlo de fracturas o para ocultar decoloraciones intensas. Se puede colocar como carillas provisionales a la espera de recibir las carillas de porcelana, ya que se pueden retirar, o como carillas definitivas; si bien su resistencia es inferior. Su vida útil suele estar entre 5 y 10 años.
Además de que son más económicas que las carillas cerámicas, una de las ventajas que presenta este tratamiento es que se puede aplicar en una sola sesión. Igual que con las otras carillas, el odontólogo previamente ha de preparar el diente. Limando la superficie que va a ocupar la carilla. Una vez colocada la resina, el odontólogo le dará forma por medio de un conjunto de micro-fresas. Por lo general, en el mismo día, el paciente puede ver restaurada su dentadura.
Si bien este es un proceso más rápido, también presenta una serie de desventajas respecto a las carillas de porcelana. Son más fáciles de romper, se pueden desprender con más facilidad, se pueden oscurecer con la ingestión de café, té o vino y con el tiempo pierden color y brillo. Por eso, para mantener estas carillas en perfecto estado, es recomendable realizar visitas periódicas a la clínica dental.
Beneficios estéticos de las carillas dentales.
Las carillas dentales tienen efectos estéticos y restauradores. Aunque ya hemos hablado someramente de algunos de ellos, vamos a centrarnos en los primeros. Estos son los principales beneficios estéticos de las carillas:
- Corrección de la decoloración de los dientes: Las carillas pueden cubrir manchas y decoloraciones en los dientes, restaurando su color natural y proporcionando una sonrisa más blanca y brillante.
- Mejora de la forma y el tamaño: Con las carillas, es posible corregir imperfecciones en la forma y tamaño de los dientes, como dientes desiguales, cortos, desgastados o excesivamente anchos. Logrando una apariencia más uniforme en toda la boca.
- Cierre de espacios entre los dientes: Las carillas pueden cerrar pequeños espacios o brechas que hay entre los dientes, mejorando la alineación y la armonía de la sonrisa sin necesidad de recurrir a la ortodoncia.
- Mejora la alineación dental: Si los dientes están ligeramente torcidos, las carillas pueden proporcionar una apariencia más uniforme, creando la ilusión de una sonrisa alineada.
- Personalización de la sonrisa: Las carillas son altamente personalizables en cuanto a forma, tamaño, color y brillo, lo que permite adaptarlas a las preferencias estéticas del paciente, diseñando una sonrisa natural y armoniosa.
- Conserva la estructura dental: A diferencia de otros tratamientos estéticos, como las coronas dentales, las carillas requieren una mínima preparación del diente natural, lo que preserva la mayor parte de este.
- Rápido y poco invasivo: El proceso de colocación de carillas es relativamente rápido y poco invasivo, lo que significa que los pacientes pueden disfrutar de una sonrisa transformada en pocas visitas al dentista, sin necesidad de largos períodos de recuperación.
- Mejora la autoestima: No hemos hablado de este punto, pero, evidentemente, una mejora en la apariencia de nuestra boca nos proporciona una mayor seguridad y mejora nuestra autoestima.
Famosos que se han puesto carillas.
Las carillas son un tratamiento bastante efectivo en cuanto a estética dental se refiere. Tanto es así que muchas personalidades del mundo del cine, el espectáculo y del deporte se las han colocado en alguna ocasión. El Dr. Blanco comenta en su blog personal algunos ejemplos. Estos son tres de los más representativos:
- Cristiano Ronaldo.
El popular delantero portugués Cristiano Ronaldo, que jugó en su día en la Juventus y en el Real Madrid, luce una sonrisa de anuncio, entre otras cosas porque cuando se hizo famoso se instaló unas carillas de porcelana. De pequeño siguió varios tratamientos de ortodoncia, pero no logró alinear por completo su dentadura. También, cuando era adolescente, se aprecia que tenía unos dientes desiguales. Debido a los impactos a los que está sometido por su profesión, las carillas de porcelana muestran, en este caso, su gran resistencia.
- Nicole Kidman.
Cuando Nicole Kidman empezó en el cine, en su Australia natal, siendo una joven de 16 años, tenía unos dientes algo inclinados y opacos. Hoy exhibe una de las sonrisas más espectaculares del mundo del cine entre otras cosas por la colocación de carillas de porcelana y por una cirugía gingival en la que alineó la altura de sus encías.
- Tom Cruise.
La relación de Tom Cruise con las clínicas dentales ha sido toda una odisea. Durante años se ha sometido a largos tratamientos de ortodoncia con el objetivo de solventar su mala oclusión dentaria. A ello se le une, que el actor de joven, ya presentaba una cierta decoloración en los dientes, que tendían a ser amarillos. Las carillas dentales han logrado que al fin pueda lucir una sonrisa de Hollywood.
Como vemos, las carillas dentales son un tratamiento estético y restaurador, ampliamente utilizado y que presenta un alto porcentaje de éxito. Consulta a tu dentista si piensas que las necesitas.