Si estás de viaje en Valencia y quieres conocer la ciudad, no te pierdas la Albufera. Es un sitio idóneo para observar la presencia de aves o ver el atardecer.
Mientras paseamos en barca por la Albufera gracias a los profesionales de la empresa El Bessó, nos explican que en invierno podemos encontrar en este parque el pato colorado, el ánade azulón, el cuchara común y el porrón europeo.
Este parque es uno de los más importantes de toda la Comunidad Valenciana. Muchos cocineros optan por el arroz que se cultiva en el entorno del Parque Natural de la Albufera.
Se trata de un arroz que una vez cocido, mantiene la textura firme, pero cremosa. No te vayas de la ciudad sin probar la paella Valenciana, ya que es Bien de Interés Cultural Inmaterial.
Los ingredientes que se utilizan son: arroz, tomate rallado, aceite de oliva virgen extra, pimentón dulce, azafrán, pollo, conejo, judía verde (bajoqueta) y garrofó (es una alubia grande y plana).
Aunque también se admiten otros ingredientes extras, como pato, costillas de cerdo, romero, ajo picado, caracoles, alcachofas y tavella (alubia pequeña). Pero la paella Valenciana no lleva ni guisantes, ni marisco, ni chorizo, etc.
Este plato también destaca por el ‘socarrat’, los expertos explican que cuando el arroz está ya sequito, se recomienda dejarlo un minutito o dos más con un poco más de fuego para que se haga el ‘socarrat’.
Se trata de una capa de arroz que queda tostado al fondo de la paella. Pero si no se hace de la forma adecuada, dejará un aroma y un regusto a quemado en todo el arroz.
El secreto de un buen “socarrat” está en la cantidad de grasa con que se elabora el arroz, procede del aceite del sofrito y de la carne que se incorpora al guiso.
Es distinto si se echa pollo o conejo, ya que es mucho menos graso, y también debes tener en cuenta si en lugar de agua se utiliza un caldo.
Si eres goloso te encantará los fartons, tradicionalmente se sirven con horchata de chufa. Se trata de unos bollitos alargados cubiertos de glasa.
Para su elaboración se necesita harina de trigo, leche, azúcar, aceite, levadura y huevos. En invierno también se puede tomar con chocolate o un vaso de leche.
Te encantará la combinación de estos bollitos con un vaso de horchata. Debes saber que está bebida es energética y aporta beneficiosos para la salud, según diversos estudios de la Universidad de Valencia.
Ayuda a prevenir la arterosclerosis, contiene vitaminas y posee propiedades digestivas muy saludables por su alto contenido en almidón.
En 1824 el Doctor Alcázar aconsejó un tratamiento a base de leche de chufas al II Conde de Soto Ameno. La horchata de chufa aporta los siguientes beneficios:
-No contiene lactosa ni caseína ni gluten.
-Es rica en vitaminas C y E.
-No contiene glucosa y es baja en sodio.
-Es rica en magnesio.
El periódico digital Okdiario informa que «100 gramos de chufas aportan el 13% de la dosis recomendada de este nutriente. El magnesio participa en más de 300 funciones bioquímicas en el cuerpo. Entre ellas colabora en la síntesis de las proteínas, contribuye a la salud ósea y a la producción de energía».
-Contiene antioxidantes, fósforo, calcio, hierro y potasio.
-No contiene glucosa.
-Si no le añadimos azúcares, la horchata de chufa es una bebida apta para diabéticos.
-Controla los niveles de colesterol, ya que su contenido en ácido oleico es muy similar al del aceite de oliva.
-Previene la arterioesclerosis.
-Aporta enzimas que facilitan la digestión.
-Ayuda a evitar gases, flatulencias y las diarreas estivales.
En Valencia también puedes disfrutar de las naranjas. Está la variedad Valencia Late, que es la más consumida en el mundo. Es una naranja de corteza fina, con o sin pepitas en la pulpa y algo alargada.
Los mejores meses para consumir naranjas son los que van desde noviembre hasta abril. Es una fruta de escaso valor calórico, ya que solo aporta 38 calorías por cada 100 gramos.
Además, cada 100 gramos de naranja posee el 64% de vitamina C. Las naranjas poseen un alto contenido de vitaminas A y B, y también son ricas en magnesio, calcio, potasio y fósforo.
Esta fruta es idónea para prevenir resfriados, posee propiedades antioxidantes, reduce la inflamación de la artritis reumatoide y fortalece las articulaciones.
Las naranjas son ricas en carotenoides y flavonoides, que pueden ayudar a reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares.
En Valencia también puedes mezclar la horchata con zumo de naranja, aunque hay que procurar que haya el doble de horchata.
