Ya sea que estés comenzando con un nuevo negocio o ya ha llegado el momento de reformar el tuyo, en materia de cocina hay que prestar especial cuidado; y es que está es la parte más importante de tu restaurante. Es en este espacio donde se preparan los platos producto de tu local y donde tus trabajadores desempeñan sus múltiples funciones.
Por eso, es muy importante que tomes en cuenta algunos aspectos que te ayudarán a elegir una cocina que sirva como la herramienta de trabajo ideal para tu negocio y no te arriesgues a hacer una mala compra por pecar de ignorante. Para esto, buscamos el consejo experto de los especialistas en cocinas para hostelería de Mayfriho:
1.Identifica tus necesidades
El primer paso antes de tomar una decisión es tener claras cuáles son tus verdaderas necesidades. De esta forma, podrás tomar la decisión de compra más adecuada de acuerdo al tipo de local; y es que toda cocina industrial debe estar estrechamente relacionada con los requerimientos del establecimiento para que cumpla de forma óptima los objetivos para los que fue adquirida.
2.Delimita tu presupuesto
A todo negocio hostelero le encantaría contar con el equipamiento más completo y de mayor calidad. Sin embargo, tenemos que ajustarnos al presupuesto con el que contamos.
Si no dispones de un gran presupuesto, no te desanimes. Recuerda que no se trata de elegir la cocina industrial más cara del mercado, sino aquella que se ciña a tus necesidades, con la mejor relación calidad-precio. Hoy en día existen muchas opciones y de seguro encontrarás una que encaje con las características que buscas y la inversión que te puedes permitir.
3.Mide el espacio
No olvides definir bien el espacio que va a ocupar tu cocina industrial antes de comprarla. Para esto, debes primero tomar al detalle las medidas de las que dispones, para distribuir de forma óptima los diferentes elementos.
Ten en cuenta que en este espacio deben disponerse los fogones, electrodomésticos, utensilios, estanterías para el almacenamiento, etc. Dejando siempre el espacio suficiente para que los trabajadores desarrollen su trabajo de forma eficiente.
No solo eso, si no que debes pode garantizar que el personal tenga áreas para almacenar, preparar, elaborar y servir los alimentos y hacerlo de forma cómoda y sin interferencias, lo cual, a su vez, contribuirá a un servicio más cómodo, ágil y eficiente para tus comensales.
4. Encuentra el material adecuado
La calidad de una buena cocina se mide por el material de la misma; y es que este determinará su resistencia, higiene y la durabilidad.
Por ejemplo, el acero inoxidable, aunquerequiere de una cierta inversión económica, ofrece características muy ventajosas como durabilidad, un grado de higiene máximo y facilidad a la hora de limpiar. No en vano es uno de los materiales más utilizados en hostelería en la actualidad.
5. Gas o electricidad
Una característica muy importante que debes evaluar cuando vayas a comprar la cocina de tu restaurante es si será de gas o eléctrica.
Así, en la actualidad, encontrarás cocinas para restaurantes, tanto de gas como eléctricas, que se desenvuelven a la perfección dentro de un ámbito profesional. Sin embargo, para alcanzar la perfección, una vez más habrá que analizar el tipo de cocina que se quiere realizar:
- Cocina de rápida elaboración. Si la oferta gastronómica de tu restaurante está basada en una cocina mediterránea clásica, como por ejemplo ensaladas, pasta o similares, la elección de una cocina eléctrica es perfecta, ya que funcionará muy bien al no tratarse de platos de excesiva complejidad.
- Cocina con más tiempo de preparación. Por el contrario, si el menú de tu restaurante está basado en guisos, comida casera, carnes y pescados, la alternativa de la cocina a gas te proporcionará un mayor control sobre el punto de cocción, obteniendo resultados mucho mejores desde el punto de vista de satisfacción de los clientes.
6. Mantenimiento
Este es un aspecto de vital importancia en cualquier tipo de cocina, en especial en las cocinas industriales utilizadas en el mundo de la hostelería; y se trata de optimizar siempre el dinero y el tiempo de la inversión para alcanzar la rentabilidad.
Por lo mismo, te recomendamos elegir elementos que no requieran de un alto grado de mantenimiento, para que no supongan una carga extra para el personal de la cocina, siendo que, como dijimos anteriormente, una de las mejores opciones en el mercado es siempre el acero inoxidable.
7. Fíjate en el estilo
También es muy importante que tus cocinas se adapten al tipo de restaurante que quieres. Ten en cuenta el estilo de comida que servirás, y sobre todo el menú; ya que de esta forma sabrás las necesidades de los platos que quieres preparar en cuanto a tiempo de cocción, intensidad de calor requerida y control de las elaboraciones. Por ejemplo, un menú basado en pastas tiene necesidades distintas a un restaurante donde predominen platos como guisos, caldos o asados; ya que estos requieren largas cocciones y tiempos de reposo. Así, definir los requerimientos de tu menú te ayudarán a decidir la cantidad y el tipo de equipamiento, además de si es mejor usar una cocina eléctrica o de gas.
8. Equipamiento
Lo único que hará funcional nuestra cocina no solo será el área de los fogones, también debemos incluir la elección del lavafondos y el espacio de almacenamiento, por ejemplo.
En el caso del lavafondos, que se refiere a la estación de lavado de manos, suele constar de un recipiente mínimo de 11 litros con un grifo mezclador o controles operados por rodilla o varita.
Al igual que hemos recomendado con el resto de la cocina, el mejor material para el lavafondos es el acero inoxidable; incluyendo para el dispensador automático de líquidos para lavar platos y abrillantadores, además del sistema que mantiene el agua a una temperatura de operación preestablecida.
En cuanto al espacio de almacenamiento con el que dotarás a tu cocina, este dependerá del tamaño de tu restaurante, la cantidad de comida que esperas servir a tus invitados, el número de estantes que necesitas para el almacenamiento en seco y si necesitas alguna opción de almacenamiento especial que implique una inversión alta
Por último, también debes tener en cuenta la seguridad de este espacio, por ejemplo, al organizarlo, puedes mantener artículos más pesados en el estante inferior, de forma que evites que las cajas pesadas se caigan y puedan causar accidentes.